
Aprovechando que estamos en la recta final de las fiestas de la Magdalena os traigo un dulce tradicional y muy sabrosa. Cuentan que surgió como muchos otros platos riquísimos de la casualidad, ya que al no tener harina en el momento de ponerse a preparar este bizcocho lo sustituyo por un puré de patatas.
A quien preguntes de Castelló le encanta, recuerda a la abuela preparándola y desde luego es una de esas recetas que pasan de generación en generación.
Espero que os animéis a prepararla y sobre todo que podáis sacar cinco minutos para que me contéis que os parece.